miércoles, 28 de agosto de 2019

juguetes desechados para concienciar contra el plástico

Un parque jurásico de juguetes desechados para concienciar contra el plástico

Dinosaurio de plástico hecho por el artista japonés Hiroshi Fuji. /EFE
Dinosaurio de plástico hecho por el artista japonés Hiroshi Fuji. / EFE

El artista japonés, Hiroshi Fuji, ha elaborado una exposición con más de 30.000 piezas para advertir de la cantidad de plásticos que generan las personas

EFEBangkok
Con más de 30.000 juguetes y piezas desechados, el artista japonés Hiroshi Fuji ha creado un parque jurásico multicolor que se expone en Bangkok para concienciar sobre la invasión del plástico desde nuestros primeros años de vida.
«Mi inspiración vino de mi sentimiento de rechazo ante todo el plástico que hay en el mundo», explica a Fuji (Kagoshima, 1960) momentos antes de la inauguración de la muestra titulada 'Plástico jurásico' este lunes en el parque creativo Chang Chui.
A lo lejos, el visitante a esta exposición se encuentra con dinosaurios multicolores en una sábana psicodélica, pero de cerca descubre que están hechos con todo tipo de juguetes recolectados en Japón y Tailandia.
«Quiero encontrar un equilibrio entre la diversión de ver todos estos juguetes, al tiempo de sentir el peligro (del plástico)», dice el artista, quien agrega que en su obra quiere darle un nuevo propósito a la masa de juguetes de plástico que tiramos.
Fuji, que ha contado con la colaboración de la Fundación Japón para organizar esta exposición, también quiere recordar con su obra que el petróleo con el que se produce el plástico proviene en parte de los cadáveres de los dinosaurios del Jurásico, más de 145 millones de años antes de nuestra era.
Entre las «piezas» de este bestiario jurásico se encuentran personajes de Disney, leones, trenes de juguete, personajes de la película animada 'Toy Story', sonrientes pikachus o el clásico Tamagotchi.
Además de visitar la exposición, que estará abierta al público hasta el 14 de octubre, los niños y adultos podrán participar en talleres en los que jugarán y luego crear obras de arte con los juguetes.
Según el artista japonés, será un proceso «muy libre» en el que contarán con la ayuda del personal de Chang Chui, un espacio de ocio y arte construido con materiales reciclados, incluido un avión comercial.

Activista medioambiental

La preocupación de Fuji por los desechos plásticos se remonta a los años 70 y 80 cuando el crecimiento económico y la producción en masa convirtió este material en un elemento ubicuo en la sociedad, desde fiambreras a cubiertos y sillas. «Quería escapar de todo eso, no me gustaba la gran cantidad de plástico que veía», asegura el artista, que imparte clases de arte en la Universidad de Akita en Japón.
Durante una estancia como profesor a Papúa Nueva Guinea en los años 80, se dio cuenta de que los residuos allí eran orgánicos por lo que volvían a la naturaleza, no había basura, hasta que también fueron invadidos por el plástico y otros materiales no orgánicos. «Ni siquiera la carencia y las crisis del petróleo consiguieron reducir la cantidad de plástico», comenta alarmado Fuji, que se considera también un activista medioambiental.
En 1997, empezó a recolectar juguetes de plástico y creó el proyecto «Bazar Kaekko», en el que los niños cambiaban sus juguetes por otros de segunda mano. Siguió acumulando juguetes de plástico desechados y, aunque no lleva una cuenta precisa, calcula que puede tener alrededor de 100.000 piezas en su colección con las que realiza obras de arte.
Además de los juguetes, alerta de que gran parte del plástico que desechamos van a parar a los ríos y los océanos, lo que causa un gran impacto en la vida marina o se introduce en la cadena alimentaria a través de los microplásticos. Antes de pasar por Bangkok, «Plástico jurásico» se expuso en el Festival de Sídney en 2018 y más adelante volverá a Japón.

jueves, 8 de agosto de 2019

Lázaro en el museo del fracaso: una colección de fracasos en innovación


Lázaro en el ``Museo del fracaso´´

Una colección de fracasos en innovación.
Victoria Pérez - Jun 13, 2017 - 16:57 (CET)





Ninguno de estos productos tuvo éxito, por eso no los conoce nadie. El museo del fracaso toma todos estos inventos y los muestra al mundo.

El director del museo Samuel West: "Alrededor del 90 por ciento de las innovaciones fracasan."


¿Salsa de tomate Heinz verde? ¿Patatas Pringles sin grasa? ¿Una versión del Monopoly con la imagen de Trump? No es necesario ser un experto para saber que ninguno de estos productos tuvo éxito porque no los conoce nadie.

Museum of Failure, o Museo del fracaso en español, es una colección de los más grandes fracasos en innovación.



La mayoría de los proyectos de innovación fallan, los estudios demuestran que los nuevos productos fracasan con una tasa de entre el 40% y el 90%, dependiendo de la categoría, y que el 47% de las empresas pioneras ha fracasado. Además, estas probabilidades se han mantenido razonablemente constantes en los últimos 25 años. Y este museo toma todos estos fracasos escondidos bajo la alfombra de sus respectivas compañías y los muestra para proporcionar a los visitantes una fascinante experiencia de aprendizaje: el fracaso es normal.

El perfume de Harley-Davidson
La bicicleta hecha de plástico

El Museo del fracaso acaba de abrir este junio en Helsingborg, Suecia. Concentra todo en una sola habitación pero, por dentro, sobra espacio para que el curador, Samuel West, reúna algunos de los desastres comerciales más grandes del mundo, y también algunas cosas que no funcionaron de la manera que se planificó. La mayor parte de la colección ha sido adquirida por él a través de Internet, pero otras veces ha sido donada.


Algunas de las rarezas que concentra son: una bicicleta hecha 100% de plástico, el perfume de Harley Davidson, la lasaña de Colgate, el lápiz para las mujeres o la primera cámara digital —producida por Kodak, en realidad, este último fue un producto de éxito, pero entró en escena en circunstancias desafortunadas. Poco después de que llegara al mercado, Kodak anunció la quiebra—.


La lasaña de Colgate
Bolígrafos de Bic para mujeres

También el hogar de algunos de los dispositivos de alta tecnología, como las sobradamente conocidas por su fracaso Google Glass; o el Apple Newton, uno de los primeros PDA con capacidad de reconocimiento de escritura, considerado un fracaso de Apple en su momento, tras el cual abandonó ese sector, pero que también abrió el camino para los iPhones y iPads que utilizan millones de personas hoy.


Como decía Robert F. Kennedy: “Solo aquellos que se atreven a fracasar a lo grande pueden conseguir grandes cosas”. Aprendamos de ellos en lugar de negarlos.

También hay disponible en Youtube una entrevista en vídeo donde se muestran más de los inventos: